" Pintando mis rosas"

miércoles, julio 06, 2011

Hola a todos y todas. Ya estoy aquí y contento de poder retomar lo que dejé en su momento.
Pero hoy para inaugurar la nueva temporada de mi blog quiero hacer una entrada para homenagear a una persona y por ello quiero hacer mi entrada con el título de su blog Pintando mis Rosas,
Una persona que aunque ya no está con nosotros siempre quedará en mis recuerdos. Me refiero a María de los Ángeles, una abuelita que desde el otro continente (Uruguay) luchó durante muchos años con su diabetes y su cáncer de pulmón y que ayer por la noche nos abandonó. Gracias a su profesora por su agradecimiento y tan bellas palabras hacia mi persona.

Aquí os dejo amigos/as blogueros/as lo que me comunicó:

"Miguel Angel, tal vez te parezca extraño pero quiero agradecerte por los comentarios que durante un tiempo dejaste en un blog. El blog "Pintando mis rosas", de una alumna que hoy he ido a despedir al cementerio. María de los Ángeles luchó durante muchos años con su diabetes y su cáncer de pulmón y en un golpe bajo de la vida anoche se atoró con un trozo de carne y falleció. Ella fue feliz con su blog, y sentada en su silla de ruedas "viajaba" tan solo a traves de su computadora. Es la primera alumna que pierdo y me siento muy triste, pero he mirado su blog y no podía despedirme de él sin agradecer cada una de las palabras amables que le fuiste escribiendo, esas que la arrancaban una sonrisa, aunque estuvieras al otro lado del mundo... Muchas gracias, te lo dice sinceramente, su profesora".

La verdad que me ha conmocionado mucho conocer su pérdida, decir adiós no es un momento de incertidumbre, te despides nomás de las cosas superficiales, de lo que quieres, por lo que luchas o por lo que amas.

María de los Ángeles, espero que ahora puedas dedicarle todo el tiempo a esos rosales que con tanto amor cuidabas ahí arriba donde dicen llamarle el paraíso. No puedo decirte adios directamente pero sí con este poema.

Poema de La Despedida

Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.

Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.

Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.

Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.