"Qué mentiroso es el tío, hasta él se cree lo que cuenta"

domingo, enero 09, 2011





Hola a todos y todas. Ante todo felicitaros por el nuevo año, que aunque tarde siempre viene bien. De vuelta con ustedes para dedicar un poco de mi tiempo. La entrada de mi post invita un poco a la reflexión porque trata sobre una experiencia personal que he querido compartir con ustedes para conocer opiniones.

La experiencia se delata de la siguiente manera: un día un amigo llamado X me cuenta algo que a ciencia exacta para creible pero nunca llegas a pensar lo contrario. Te lo encuentras otra vez y te atropella con la misma historia, pasa al otro día y me cuenta lo mismo.... empezamos la semana y me lo encuentro y sigue con lo mismo pero cambiado de contexto.....y al final sacas conclusiones positivas o negativas sobre esta persona.

Me habían hablado no muy bien de esta persona. La persona que me puso al corriente es el tipico listillo enterado del grupo que conoce todo sobre la vida de cada cual. No soporto a este tipo de personas. Siento mucho si alguien se siente por aludido. Pero SOY COMO SOY y no me gusta etiquetar o señalar con el dedo a nadie por muy mala persona que pueda resultar, por muy criticón que sea.. etc.
Con todo ello me refiero a que no hay que mentir, porque al final aunque los demás lo tomemos en serio luego se desacredita lo que se afirma y se colocan etiquetas sociales.

Una mentira repetida mil veces, puede parecer una verdad, sin embargo, en su esencia, siempre será una mentira...

Estarán de acuerdo conmigo, estimados amigos, que la mentira es uno de los peores defectos del ser humano, sobre todo, la mentira dicha con el único afán de obtener un beneficio personal en perjuicio del resto de las personas. Es tan detestable la mentira, que desde niños nos enseñaron sobre las mentiras de un personaje llamado -pinocho-, a quien le crecía la nariz cada vez que decía un embuste. Un cuento al fin, pero lleno de sabiduría de vida.

Habrá quienes, sin embargo, busquen justificar su afecto hacia la mentira, tratando de explicar que algunas son "piadosas" y se dicen con el fin de no perjudicar a los demás, sin embargo, la piedad, como una virtud humana, no puede estar fincada en una mentira. Otros dirán que depende de la magnitud de la mentira, unas serán mentirillas y las otras mentiras ..., sin embargo, la mentira es en su esencia inconmensurable y por lo tanto no tiene tamaño ni puede ser medible, a pesar de que sus efectos conlleven daños o consecuencias leves o muy graves.

Muchos/as ya sabemos que a pesar de ello, de ser un precepto milenario y además bíblico, los seres humanos continuamos con la terca necedad de seguir diciendo mentiras y con ello, tratando de fincar nuestro "desarrollo" personal sobre esta práctica cotidiana.

Nuestra reflexión nos lleva también a considerar que hay quienes se justifican diciendo que nunca levantan falsos ni expresan mentiras, sin embargo, no debemos olvidar que "ocultar la verdad" es también una forma de mentir, y en consecuencia de hacer daño a terceros y lograr beneficios personales. Quienes ocultan la verdad, son igualmente detestables. Podemos complementar diciendo que al hombre que le gusta o disfruta diciendo mentiras o engañando a los demás, igualmente le disgusta ser engañado con mentiras. Aquí se refleja un ego adicional en este tipo de personas, que además de mentirosos y embusteros, son convencionalismo.

Hay un dicho que dice: "la mentira dura mientras la verdad llega", lo que significa que la mentira no es infalible y no puede ocupar el lugar de la verdad, pues mientras esta es brillante y llena de luz, aquella es opaca y tenebrosa. A pesar de ello, el hombre es tan hábil diciendo mentiras, que en ocasiones se auto engaña y durante muchos años vive creyéndose sus propias mentiras y fantasías, tal como le pasó al supuesto conocido con quien tuve la oportunidad de conocer.

¡No nos podemos dejar engatuzar por las mentiras de los demás, tenemos que mantenernos con una actitud alerta para distinguir las mentiras y las verdades de cada quién. Es una responsabilidad a la que no debemos de renunciar, aunque al fin y al cabo, también debemos de estar consientes que hay quienes pueden engañar a mucha gente durante algún tiempo, o bien, engañar a algunas gentes durante mucho tiempo, pero nunca podrán engañar a mucha gente durante mucho tiempo.

Aquí os dejo una bonita canción de Enrique Iglesias para animar un poco a que nos olvidemos de las mentiras..


5 comentarios:

MAMÉ VALDÉS dijo...

La mentira puede hacer mucho daño, no soporto a los mentirosos, pero por desgracia están ahí, un saludo.

La verdad existe, sólo se inventa la mentira. (Georges Braque).

Alfonso Saborido dijo...

La mentira es una de las principales armas del ser humano. Y crece como las setas. Yo veo cientos a diario.

SILVIA dijo...

La mentira tiene las patitas cortas.
Alguien que miente, es que tiene una vida de lo más aburrida.
¡odio la mentira!
Un abrazote!!!

Vaeneria dijo...

La mentira hace tanto daño como una verdad oculta o deformada. Un verdad, por lo dolorosa que sea, siempre será más beneficiosa, a corto o largo plazo, que la mentira mejor urdida.
Saludos :)

Jabo dijo...

Que gran verdad escribes...
"la mentira es uno de los peores defectos del ser humano, sobre todo, la mentira dicha con el único afán de obtener un beneficio personal en perjuicio del resto de las personas"

Abrazo fuerte. Jabo